La llamada Pandemia puede o debe ya detenerse ?

El enfoque de ese fenómeno, desde otra perspectiva, de la gente.
Si. La llamada pandemia, ha sido declarada por diversos organismos u autoridades, a nivel mundial, y de los consejos de salud en naciones. Y acatada por sus estados y consejos sanitarios a nivel interno, como de sus municipios. Ante ello qué nos queda a nosotros, a cada simple mortal, pensar, reflexionar, cuestionar o hacer?
¿Acaso la humanidad esta condenada, a ser una víctima pasiva, ante los efectos negativos de la misma?.
Acaso no hay o pudiese haber ya, alternativas efectivas, seguras, de cura, a base de medicamento ya existentes, que sirvan para detener, ese su avance; que pareciera incontenible; amenazando la salud, de la raza humana. Y sin poderle hacer frente, de manera eficaz?
¿ Acaso poco o nada, se puede hacer, ante sus nefastos efectos multifactoriales, pues no solo ha venido afectando la salud física de millones, en todo el globo terráqueo; sino que desata, reproduce, por si misma y de manera encadenada, círculos viciosos nefastos, en otros sectores de la sociedad humana, provocando efectos colaterales, relacionados con factores psíquicos emocionales, de miedo, histeria y psicosis,
Y toda esa cauda de males, no queda ahí, acarrea la devastación de las economías de familias y personas, que viven al día, en el absoluto auto empleo; llevándolas a situaciones de hambre, por la falta de ingresos para sobrevivir. Así como también para pequeños, medianos e incluso grandes empresas y consorcios, que los arrastrara a la quiebra, con el despido de trabajadores, si la contingencia epidemiologica, se prolongase demasiado. Y esa misma  profundización, de la llamada pandemia, acarrearía; de hecho, ya en algunos países empiezan a manifestarse, aisladamente, por fortuna; brotes de inconformidades, en los grupos más vulnerables, lo que conllevaría, desgraciadamente, a desestabilizar y colapsar aún más, en muchos de ellos, (como en México, por solo citar alguno); sus servicios esenciales y consustanciales a todo estado, como es el de brindar seguridad a sus pueblos.

De  ese tamaño es la cuestión, que debe ocupar a todo ser humano comprometido, con el bienestar de sus familias, pueblos, Ciudades y naciones en conjunto.
Resolver de manera definitiva o detener el avance del fenómeno aquí planteado, es en ultima instancia un asunto de bienestar general, de armonía y paz social.
Consideramos que el enfoque correcto, para el análisis de esta cuestión, debe darse desde otra perspectiva, distinta a la prevaleciente en las diversas instituciones de salud; de las autoridades sanitarias y las empresas medicas y farmacéuticas dominantes, según la visión mercantilista imperante en materia de salud.
Lo abordaremos en otra entrega…