La Gobernadora Maria Eugenia Campos Galvan Falta a la verdad: Dip. Alfonso Ramírez Cuellar
La gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, miente. Falta abiertamente a la verdad cuando asegura que no existe diálogo ni apertura en el debate nacional sobre la nueva Ley de Aguas. Así lo dijo el Diputado Alfonso Ramírez Cuéllar
Sus declaraciones no sólo son falsas: son irresponsables, peligrosas y buscan manipular políticamente un tema que es de seguridad nacional.
El legislador federal Alfonso Ramírez Cuéllar, dirigente del Barzon Nacional, organización de la sociedad civil que a encabezado las principales luchas del campo mexicano, expresó en un comunicado en el que rechaza las declaraciones irresponsables de la gobernadora de Chihuahua María Eugenia Campos Galván, respecto al proceso de diálogo sobre la iniciativa de Ley de Aguas Nacionales.
Ramírez Cuéllar señala que
Mientras la gobernadora se victimiza y acusa cerrazón, la Cámara de Diputados ha realizado audiencias públicas, encuentros abiertos y parlamentos donde han participado incluso representantes de su propio gobierno, como el Director de la Junta Central de Aguas, Mario Mata Carrasco. Negar esa participación no es un error: es una mentira deliberada.
Y dicho diputado indicó que: “Durante noviembre, legisladoras y legisladores recibieron a productoras y productores de todo el país —incluyendo Chihuahua— para escuchar propuestas, preocupaciones y alternativas. Ahí estuvieron las y los chihuahuenses, ahí se entregaron más de 450 propuestas y ahí se debatieron temas fundamentales: concesiones, sistemas comunitarios, derechos indígenas, uso agrícola y el derecho humano al agua.
“Pese a toda esta apertura pública y documentada, la gobernadora Campos insiste en decir que no se les escucha. ¿Por qué miente? ¿A quién pretende engañar? ¿Qué intereses está intentando proteger?
“Porque lo que sí es verdad —y lo sabe perfectamente— es que Chihuahua es el estado con el mayor nivel de sobre explotación de acuíferos del país. Cada año se extraen 3,200 millones de metros cúbicos más de lo concesionado, equivalente al caudal conjunto de La Boquilla y Las Vírgenes. Eso no es una exageración: es una emergencia hídrica.
También es verdad que en Chihuahua existe un acaparamiento de concesiones y constancias de libre alumbramiento en manos de un puñado de políticos y empresarios, muchos de ellos cercanos al poder estatal. Y también es verdad que el estado arrastra cinco mil pozos ilegales, resultado de años de negligencia, permisividad y pactos de silencio.
“Mientras tanto, más de cien mil chihuahuenses no tienen garantizado el derecho humano al agua. No parece ser por quienes la gobernadora levanta la voz.
“María Eugenia Campos no está defendiendo a las y los productores: está usando la crisis del agua como bandera política, mintiendo sobre un proceso de diálogo que sí existe, que sí es plural y que sí ha recibido a representantes de Chihuahua.
Por último Ramírez Cuéllar expresó: “La gobernadora debería asumir su responsabilidad frente al grave deterioro hídrico del estado en lugar de generar confrontación y confusión. El agua no es botín electoral ni pretexto para fabricar enemigos. Es un asunto vital para la seguridad nacional, la productividad del campo y la vida de la gente.”
